Cardenal Cipriani pide urgente educación en la moral en Perú
En una de sus misas
dominicales, del mes de noviembre del presenta año, el fascista con sotanas
de Juan Luis Cipriani Thorne manifestó que el ministro de salud "…en lugar
de cuidar la salud, promueve una campaña de libertinaje…" No es lo nuestro
defender posiciones de gobernante o gobiernista alguno. Pero si recordar a
nuestros lectores que si de acusar de libertinaje se trata los primeros
grandes libertinos son los curas católicos. No les basta tener dogmas,
deformar a los estudiantes con sus prejuicios, haber difundido la
discriminatoria idea de la inferioridad de la mujer, etc.
El gran problema de estos falsos pastores es que su sucia careta ha quedado
al descubierto. Y lo que se tiene no es nada angelical sino una sarta de
degenerados que practican pedofilia y hasta fornican con la mujer de su
prójimo. Esto último fue noticia de muchos periódicos. O acaso ya nos
olvidamos de aquel sacerdote que aparecía en los titulares de los periódicos
de Lima como “El cura eléctrico” Si quieres ver libertinaje Juan Luis, no
mires la paja en el ojo ajeno.
Por si fuera poco este alegre pastorcillo también pregonó sobre una
educación en lo moral para saber diferenciar el bien del mal. Aunque ya
sabemos que para estos mono-neuronales la educación en lo moral es sinónimo
de educación moral católica. De allí que se remita a su catecismo sectario y
excluyente.
Durante la misa dominical, el purpurado dijo que la gente necesita saber
"qué es una trampa, qué es robo, qué es abuso, qué es mentira, de lo
contrario todos vamos por la vida mintiendo, robando, abusando". Lo cierto
es que los pastores de cualquier secta sea religiosa o política se la pasan
mintiendo. Hacen del mentir el sustento de sus propias economías.
Vean este consejo de Cipriani: "No te canses de rezar, de luchar, de buscar
siempre la verdad, el destino de un católico es luchar por amor, hasta el
último instante. Hay que vencer la última batalla, y como no sé cuál es la
última, hay que vencer la actual, la de hoy, en el hogar, en el trabajo, con
los amigos. Reza, busca a Dios, conócelo, estudia el catecismo, y así
veremos qué cercano está Dios", por lo visto sólo los católicos buscan
siempre la verdad y luchan por amor. Todo aquel que no es católico –para
este embaucador de multitudes- no busca la verdad ni el amor. Ellos tienen
la propiedad privada de la verdad y el amor. Que tal sectarismo el de este
pastor. Ojalá que pierda su rebaño. Te lo pedimos de todo corazón.
Zacarías
Humanidad. Nº 17